BITÁCORA SIN FINAL

 LAS CAMPANAS DE NUESTRA IGLESIA

Hoy al despertar...

creí escuchar el sonoro tilín-tilán

de las campanas de bronce de la

antigua iglesia llamando a misa.

Creí oír el alboroto de las palomas

sobre el matacán saludando el día.

Creí ver el sol naciente estrellando

su luz y volviéndose añicos sobre el

ápice vertical de la cruz de los católicos.

Después de tanto tiempo...,

las campanas de amor que resonaron

en tu trémulo espacio no era más que

una bella ilusión desvanecida...

Todas las reacciones:

1Carlos Eduardo Riveros Alvarez