TESTIGO DE MI PROPIO ENTIERRO

TESTIGO DE MI PROPIO ENTIERRO

Dicen que te tienen miedo, pero todos salen a hacerte compañía, los caballeros elegantes con sus mejores trajes, las mujeres con sus escogidos vestidos y perfumadas con sus fragantes colonias, los niños, lo vendedores, las beatas rezanderas con sus rosarios de cuentas y la uña del pulgar desgastada de tanto separar los eslabones, los alcohólicos y los acostumbrados a enterrar a los muertos, todos salían de la iglesia y otros muchos, esperaban en la plaza del pueblo..., rodeando mi féretro y tú con tu entrecejo fruncido y tus flores, tú con tu funesto color negro y tu silencio sepulcral estás ahí escoltándome como una vieja amiga; me conoces desde antes, creo que si no me falla la memoria desde el 3 de agosto de 2003; esa vez te quedaste como hiena hambrienta observando, con tu cabeza hueca y nauseabunda esperando para ver cómo moría... cómo exhalaba mi último suspiro; sabes...? no te tengo miedo... ¡tú sabías que yo era un duro! y que he batallado contra mil muertes más y contra tus inventadas formas de morir, tu asquerosa nariz chata rosando mis labios... ¡ni siquiera pestañeaste! ¡es un decir...porque no tienes pestañas! sólo dos órbitas huecas hendidas en tu oval frente, que como un huevo adorna tu fría mirada desde los confines del averno.

Esta vez todos salieron a mirarte atraídos por tu misterio, era un bello día de sol radiante, y la gente salió vestida con sus mejores atuendos sólo para estar cerca de ti, todos salieron a tu encuentro y más temprano que tarde lo harán cuando les toque el turno; los que no estaban en la plaza salieron a los balcones solo a mirarte y los otros en la calle querían tocarte, esa maldita manía de estar empujándose a empellones unos a otros sólo por saciar la curiosidad; como dicen " no existe muerto malo", pero no faltan los malpensados que se echarán la señal de la cruz para que no los toque los graves pecados de este muerto.

Siempre estarán los mismos personajes del pueblo, el ladrón de cuello blanco que con aires de buen ciudadano le quiere echar polvo a su pasado ominoso, el carnicero, el panadero, el chofer, el alcohólico que llegó amaneciendo a la velación en busca del último trago, las viejas beatas y chismosas que no van a rezar, sino, a ver como hacen trisas la moral de la primera dama del pueblo y a denigrar de todo el mundo, pero, siempre existe un personaje central después de todo..., ¡y eres tú! sólo tú, porque los presentes y hasta los ausentes sólo hablan de ti.

¿Y por qué oscura muerte? a ti te buscan... por esquiva, por ambiciosa, por lóbrega, por ser quien eres, porque eres la que se lleva a todo el mundo, al rico, al pobre, al papa, al ortodoxo, al ateo, al creyente, al filósofo, al estúpido, a la mujer bella y lasciva, a la fea impúdica...por fea, al sabio, al ignorante, al anciano, al niño.

¡Antes...! a los muertos los enterraban con todo el oro que poseían, con sus bienes, en cambio a mi me acompaña un paraguas, porque en el infierno también llueve.

__¡Tú eras como todos...! __me dijo__ Vivías corriendo escapando de mi abrazo para llegar al final del camino y darte cuenta que desde que naciste estás maldito, tenías el pasaje reservado desde antes y sabías que, ese era tu destino, y también el de los demás..., todos están contados unos con otros, en orden, y sólo yo sé que número le corresponde a cada uno, yo decido cómo, yo decido cuándo, yo tejo la mortaja de cada uno desde las sombras del averno, ese es mi secreto, no dejar que la luz te alumbre por completo, y que se vaya apaciguando lentamente..., ese es un buen destino, no crees...? a veces es mejor llevarte que dejarte con suplicios, mejor que vivir huyendo de la otra muerte, ¡ves..., no soy tan cruel!

__¡Eres una estúpida muerte! ___Le contesté..., algunos te ven sólo al final, yo te he visto toda la vida, desde que nací te conozco, abyecta muerte, vivo y sigo viviendo porque no me he muerto todavía..., allí en ese féretro no estoy yo..., ¡te he engañado de nuevo...! sigo vivo y coleando, no podrás llevarme todavía porque sigo creciendo, reinventado mis sueños, y mientras esto este sucediendo, subyace mi inmortalidad por encima de ti... ¡muerte oscura!

¡Qué paradoja...!__ te crees muy muerte, pero..., te estás sintiendo más viva siempre, la realidad es que te vas deshaciendo en el camino hasta llegar a mi convertida en una asquerosa muerte viva, casi invisible, imperceptible, ¡humana..., sí humana! ¡no has podido matarme...! llevas días, semanas, años, tratando de colarte por entre cualquier resquicio de mi vida, te veo posada en mi ventana sin poderme atrapar y desapareces por un tiempo así como en el pasado, y vuelves a aparecer tratando de llenar mis espacios por vivir.

__¡Tu misma me los has dicho...!__ "te esperaré, tengo mucha paciencia, me lleve a tus padres, y algunos queridos amigos tuyos".
__Lo sé __ y pienso que será inevitable__ lo único que me ha quedado es mi dolor, un corazón hecho pedazos que sólo vive con su lado izquierdo, ¡pero, con esto me basta...!__ Cuando por fin decida ir contigo, moriré, antes de los que amo.